La difteria, también conocida como garrotillo, es una enfermedad infecciosa de carácter agudo, causada por la bacteria Corynebacterium diptheriae. Se caracteriza por la presencia de pseudomembranas en la superficie de vías respiratorias, que pueden incluso afectar a las vías digestivas superiores.
Las pseudomembranas producen la oclusión de las vías aéreas (dificultades respiratorias), que da lugar a disnea y/o a estados de shock en los casos más graves.
Evolución de la difteria
La difteria ha sido considerada a lo largo de los años una de las enfermedades más frecuentes en el mundo, constituyéndose a su vez, como una de las principales causas de mortalidad.
Sin embargo, el descubrimiento de una vacuna eficaz a mitades del siglo XX provocó el descenso progresivo de su incidencia.
Actualmente la difteria sigue siendo endémica en algunos países, suponiendo un problema para la salud pública por su carácter contagioso. Las regiones del mundo más afectadas son Asia, África, América del Sur y Oriente Medio, así como algunos países de Europa Oriental. El último caso de difteria en España data de la década de los 80.
¿A quién afecta la difteria?
- Personas no vacunadas.
- Personas con escaso nivel de higiene.
- Población infantil.
- Población anciana, a partir de los 60 años.
- Turistas en zonas endémicas.
¿Cómo se transmite la enfermedad?
La bacteria se transporta de una persona infectada o portadora a través de unas gotitas respiratorias que se producen durante un estornudo o en episodios de tos. Es decir, la inhalación es la principal vía de transmisión de la difteria, aunque también puede producirse por contacto directo a través de la piel.
Una vez que Corynebacterium diptheriae ha conseguido infectar a otra persona esta lleva a cabo un proceso de multiplicación y colonización local formando las pseudomembranas.
La bacteria empezará a producir una exotoxina que liberará al torrente sanguíneo. Esto puede provocar necrosis (muerte celular) e inflamación de diferentes tejidos y órganos.
Uno de los factores que más influyen en la producción de la toxina diftérica es la concentración de hierro. A mayor cantidad de este mineral, menor será la producción de la toxina por parte de la bacteria.
Síntomas
Podemos dividir la difteria en dos grandes cuadros clínicos:
- La afectación respiratoria.
- La afectación cutánea, siendo menos frecuente esta última.
Es importante destacar que hay individuos asintomáticos, es decir, no presentan ninguno de los cuadros anteriores.
Afectación respiratoria
- Formación depseudomembranas grisáceas y fibrosas.
- Hemorragias pequeñas por el desprendimiento de las membranas.
- Dolor de garganta.
- Odinofagia
- Tos y estornudos.
- Congestión.
- Aparición de adenopatías cervicales (inflamación ganglionar), que en casos muy graves dan lugar al “edema en cuello de toro”.
- Babeo, lo cual indica un alto grado de obstrucción de la vía aérea.
Afectación cutánea
- Lesiones cutáneas dolorosas y enrojecidas.
- Hinchazón de las lesiones.
- Coloración azulada.
- Úlceras cutáneas.
- Posibles lesiones vaginales, oculares y en el oído.
Bacteriemia
Cualquiera de las presentaciones de la difteria puede derivar a bacteriemia. La presencia de bacterias en la sangre hacen al corazón y al cerebro susceptibles a la toxina. En los casos más graves de difteria puede producirse miocarditis y/o parálisis.
En casos de shock séptico observaremos piel azulada y fría, fiebre alta, inquietud del paciente y exudados mucosos y grisáceos. El shock séptico puede ser mortal.
Tiempo de incubación y periodo de contagio
Tras la infección, los síntomas de la difteria suelen aparecer antes de 7 días.Es importante acudir al hospital lo antes posible, preferiblemente entre las 24 y las 48h después de la exposición.
Por otro lado, el periodo de contagio de las personas infectadas se limita a las dos primeras semanas. Esto se reduce a cuatro días en el caso de que estén siendo tratadas con antibióticos.
La difteria no siempre produce inmunidad duradera.
Prevención y vacunación
Actualmente los mejores métodos de prevención incluyen la vacunación y la vigilancia epidemiológica, para detectar brotes de la enfermedad. La protección de la vacuna tiene un periodo de alrededor 10 años, por lo que es importante instaurar vacunas de refuerzo.
La inmunidad infantil a la difteria es del 99% gracias al establecimiento de los calendarios vacunales
Otro método preventivo eficaz ha sido tratar a todos los que hayan estado en contacto con una persona infectada con antibióticos. La inmunidad infantil a la difteria es del 99% gracias al establecimiento de los calendarios vacunales.
La vacuna de la difteria es una triple vacuna conocida como DTP, pues combina la vacuna de la difteria, la del tétanos y la de la tos ferina.
Tratamiento de la Difteria
- Antitoxina diftérica, un anticuerpo que neutraliza la toxina.
- Eritromicina, antibiótico que constituye el tratamiento de elección.
- Penicilina G, antibiótico asociado a eritromicina.
- Corrección de la obstrucción respiratoria.
Las personas asintomáticas también reciben tratamiento con antibióticos.
¿Qué pronóstico tiene la enfermedad?
No es posible establecer un pronóstico claro de la difteria ya que se puede presentar de forma leve o grave. Esto modifica enormemente las expectativas de la enfermedad. Aun así, la difteria tiene un periodo de recuperación lento.
La infección puede llegar a ser mortal, especialmente cuando hay afectación cardíaca, pero la tasa de mortalidad para los casos leves es muy baja.
www.mejorconsalud.com